En la historia de España, hay 2 burros que han transcendido de nuestras fronteras, podríamos decir que uno llevó a su autor hasta el Premio Nobel de Literatura, Juan Ramón Jiménez Mantecón (Moguer – Huelva 24/12/1881 – San Juan de Puerto Rico 29/05/1958), Platero. Y el otro salió de la mente de un manco, que no era manco, Miguel de Cervantes Saavedra (Alcalá de Henares 29/09/1547 – Madrid 22/04/1616), Rucio, y que ha llegado a casi todos los confines del mundo, tan lejos como Sydney (12.079 habitantes – 1820), donde en 1824 se veían anuncios de venta del famoso libro, pero no solo estaba por aquellas tierras el burro español en papel. En 1888, contaba un viejo colono de Maranoa (Queensland – Australia), que en 1840, llegaron 4 burros españoles desde Londres, habían sido importados del Mediterráneo, 2 fueron comprados por la Compañía Agrícola Australiana, por 100 guineas cada uno (1 guinea – 1 libra y un Chelín), con la intención de criar mulas, se usarían en la línea Loichbardt’s travels. Los otros dos, que eran viejos, fueron adquiridos por un millonario de Sydney, Mr. Walker.
A pesar de eso en 1928, Donald Macdonald, afirmaba en un artículo sobre “Arundel Warren”, al hablar de Edward Wilson que las criaba en Arundel, que ”las mulas no tuvieron el éxito que en Estados Unidos”, el mismo autor intentaba dar una explicación, “los Australianos tenían tal vez amor y dependencia de los caballos”.
Otras zonas del mundo importaron muchos más burros desde España, por ejemplo, Argentina importó en 1897 62 burros españoles, en esos años se dedicaban a la cría de mulas para después exportarlas a Brasil y Chile. Pero el gran importador quizás fue Estados Unidos, ya los había querido George Washington, que recibió un ejemplar zamorano. Era tan así, que el veterinario militar, Silvestre Miranda, en un artículo, en el Progreso Agrícola y Pecuario, de 30/04/1928, se quejaba, de la poca preocupación de que en España había por la exportación de los mejores garañones (burro semental), y principalmente a USA, él se centraba en la zona de Vich (Cataluña), si es verdad, que a cambio pagaban altas cantidades por ellos. Tal es así que los periódicos australianos, reflejaban que en el año 1884 los precios de la importación sufrió un alza, por la alta demanda de sementales desde América, en un artículo de la prensa australiana en 1888, decía que debido a esa importación por Estados Unidos, España había puesto un derecho de exportación de £18 (461 pesetas), en verdad, no he podido confirmarlo, .Si se introdujeron derechos y prohibiciones, más adelante, el 03/01/1916, se establece una tasa para la exportación de ganado asnal 15 pesetas (63 peniques) y mulas 300 pesetas (£12 54 peniques), que pareció poco, el 21/03/1916 en el caso de las mulas se subió a 500 pesetas (£20 89 peniques), pero a partir del 27/07/1918, se prohibió la exportación, hay que recordar que estaba ocurriendo la Primera Guerra Mundial (1914-18).
Todd, de Sir William, de Mogul, de Compromise, de Tippecanoe, de Black
Haidk, de Black Warrior.
Critic – Adelaide 31/10/1903
Aunque la vía habitual de importación era a través de Londres, por ejemplo, en 1865 la Acclimatization Society in Brisbane, escribió varias cartas a Inglaterra, para obtener un burro español para la cría de mulas en Queensland, entre ellos a The Earl of Clarendon, que había importado un asno desde España, lo compró en un lugar que llamaban Astonias, (no sería Asturias), lo llevó a Grove y le costó £130. La Sociedad envió a Londres £170 (peseta nace en 1868, en 1868 serian 4.207,5 pesetas), para adquirir uno, en España un profesor de la enseñanza superior y profesional de la Escuela Central de Agricultura, cobraba 3.000 pesetas anuales. En diciembre de ese año en el barco Clan Alpine desde Londres llegaron a Brisbane 2 burros importados. No fue la única Acclimatization Society que importó asnos también la de Melbourne.
La mascota de la familia: Un buen burro español, criado en South Australia
En la prensa australiana, aparte de las noticias de importaciones, y las subastas, el anuncio más común eran paradas para la monta de yeguas y así los ganaderos de la zona podían obtener mulas, con una horquilla de precios entre £2 a £5, variaba en función de los servicios añadidos a las yeguas y el número de yeguas por granjero.
Pero también llegaron a formar parte de espectáculos, como en el Coogee Palace Aquarium de Sydney.
1001 Atracciones todos los días 1001
Entretenimiento variado todos los sábados por la tarde a las 4
Seleccionar concierto sagrado y clásico todos los domingos
Tarde a las 4 en punto
Seleccionar ensamblaje de cuadrilla
Todos los miércoles por la noche de 8 a 11. La banda de cuerdas de Ingham. Billete doble 1s 6d, Individual 1s
Los búfalos salvajes, la manada de burros españoles, los canguros, emús, monos, pajareras, loros parlantes, águilas, ponis y la mejor colección de peces de Australia son suficientes para pagar un largo viaje para verlos.
Los visitantes vienen a Coogee para pasar un día agradable
O de algún Zoo, el jardín zoológico de Perth, los tenía para el transporte de niños y con los ponis tuvo bastante éxito, por ejemplo entre el viernes Santo y domingo de Pascua, de 1899 recibió unas 2.000 personas, en 1905 llegó a 1.000 diarias. En ocasiones en los anuncios de venta dentro de la propia Australia, era habitual decir que eran dóciles, tanto en revendidos como importados, y una de las referencias era que estaban acostumbrados a llevar niños.
ZOOLOGICOS
PERTH DEL SUR
NUEVAS ATRACCIONES GRATUITAS PARA LAS VACACIONES DE PASCUA
2 BURROS JOVENES maravillosamente silenciosos para los niños
LITTLE RIDING PONY JUDY para NIÑOS PEQUEÑOS
PONY MARE GIPSY, con potrillo, para el PONY PHAETON
BURRO ESPAÑOL NEGRO GRANDE para DONKEY WAGGON
CARROS DE CABRAS, BARCOS OSCILANTES, COLUMPIOS CON OCEAN-WAVE.
AGUA CALIENTE para Fiestas de Picnic
SEIS CANCHAS DE TENIS EN CÉSPED
BAÑOS DE AGUA FRÍA Y CALIENTE
¿Y los llamaban Platero o Rucio?, pues yo no lo he visto, usaban otros nombres, Don Pedro, Don Carlos, Jenny, Don Cesar, Don, Don John
A Australia también llegó, una de las definiciones del diccionario español de la palabra burro, persona bruta, incivil, ruda, en 1888 en varios periódicos publicaron lo siguiente “Hay un burro español en North Queensland. Es padre de 13 mulas. La mayoría de ellos están en el Parlamento”. “North Queensland se jacta de tener un burro español que es padre de 13 mulas. La mayoría de ellos están en el Parlamento y el resto publica periódicos en interés de Griffith”, las cosas no cambian y son parecidas en casi todos los lugares.
Por desgracia con las palabras, Spanish donkey (burro español), ha sido conocida una máquina de tortura.
Para terminar, he intentado colocar a través de marcas en rojo, en un mapa de Australia, incluida la isla de Tasmania, y Nueva Zelanda, los lugares donde yo he encontrado referencias, que hubo burros españoles, que también he dejado escritos.
Bibliografía: Biblioteca Nacional de Australia, Biblioteca Nacional de Nueva Zelanda, Gaceta de Madrid, Estadísticas Históricas de España s. XIX – XX - Fundación BBVA.
In the history of Spain, there are 2 donkeys that have transcended our borders, we could say that one led its author to the Nobel Prize for Literature, Juan Ramón Jiménez Mantecón (Moguer - Huelva December 24, 1881 - San Juan de Puerto Rico May 29, 1958), Platero. And the other came from the mind of a one-armed, who was not one-armed, Miguel de Cervantes Saavedra (Alcalá de Henares September 29, 1547 - Madrid April 22, 1616), Rucio, and who has reached almost all the confines of the world, as far as Sydney (12,079 inhabitants - 1820), where in 1824 you saw advertisements for the sale of the famous book, but not only was the Spanish donkey of paper in those lands. In 1888, an old settler from Maranoa (Queensland - Australia) told that in 1840, 4 Spanish donkeys arrived from London, they had been imported from the Mediterranean, 2 were bought by the Australian Agricultural Company, for 100 guineas each (1 guinea - 1 pound and a shilling), with the intention of raising mules, were mainly lined in Loichbardt's travels. The other two, which were old, were bought by a Sydney millionaire, Mr. Walker.
Despite this in 1928, Donald Macdonald, stated in an article on "Arundel Warren", when speaking of Edward Wilson who raised them in Arundel, that “the mule never "caught on" in Australia as it had done -in the United States”, the same author was trying to give an explanation “In the Australian perhaps love of and dependence upon the horse were too much a part of his being”.
Other areas of the world imported many more donkeys from Spain, for example, Argentina imported 62 Spanish donkeys in 1897, in those years they were dedicated to raising mules and then exporting them to Brazil and Chile. But perhaps the great importer was the United States, George Washington had already wanted them, who received a zamorano specimen. It was so much so, that the military veterinarian, Silvestre Miranda, in an article, in the Progeso Agrícola y Ganadero, dated April 30, 1928, complained about the little concern that Spain had for the export of the best garañones ( donkey stallion), and mainly to the USA, he focused on the Vich area (Catalonia), if it is true, that in return they paid high amounts for them. So much so that the Australian newspapers reflected that in 1884 import prices suffered a rise, due to the high demand for stallions from America, in an article in the Australian press in 1888, it said that due to this importation by States United, Spain had put an export duty of £ 18 (461 pesetas), in truth, I have not been able to confirm it. If export duties and prohibitions were introduced, later, on January 03, 1916, a duty for export is established of asinine cattle, 15 pesetas (63 pence) and mules 300 pesetas (£ 12 54 pence), which seemed little, on March 21, 1916 in the case of mules it rose to 500 pesetas (£ 20 89 pence), but at As of July 27, 1918, the export was prohibited, it must be remembered that the First World War (1914-18) was taking place.
Although the usual channel of importation was through London, for example, in 1865 the Acclimatization Society in Brisbane, wrote several letters to England, to obtain a Spanish donkey for herding mules in Queensland, among them to The Earl of Clarendon, had imported a donkey from Spain, he bought it at a place they called Astonias, (it would not be Asturias), took it to Grove and it cost him £ 130. The Society sent to London £ 170 (peseta was born in 1868, in 1868 it would be 4,207.5 pesetas), to acquire one, in Spain a professor of higher and professional education from the Central School of Agriculture, a salary 3,000 pesetas per year. In December of that year on the Clan Alpine ship from London 2 imported donkeys arrived in Brisbane. This Acclimatization Society wasn't the unique that imported donkeys, too Acclimatization Society in Melbourne.
Critic - Adelaide, February 03, 1904
It was not only imported from London, but it was also imported from Spain itself, there was a time that they came from Seville, from the Duke of Modena. In 1907 in Queesland, they praised the Catalan donkey, and such is the case, that still in 1934 it was sought to import them from Catalonia, at a price of £ 140 (5,207 pesetas), £ 200 (7,438 pesetas) landed in Sydney, to raise mules, for the sugar cane fields, that year a Ford 8HP automobile, cost in Spain about 7,350 pesetas. At that time you could still see advertisements in Australia, of people interested in obtaining Spanish donkeys.
The Australasian – Melbourne, August 22, 1908
The family pet: a fine Spanish donkey, bred in South Australia
In the S. XIX, agricultural exhibitions were common throughout the world, and in them were present specimens of the Spanish breed, in London, in an exhibition of 1864, a Spanish Donkey "Don Alfonso" by Sir Henry Stracey was exhibited, valued at £ 300 . At the exhibition 10 years later, at Crystal Palace, there were 3 donkeys, valued at £ 500 each and Duke Wellington brought mules that he raised in Spain, but even earlier in November 1860, as far away as Tasmania, he was present at the Northern Agricultural Society Exhibition in Longford (Tasmania - Australia),
In the Australian press, apart from the import news, and auctions, the most common advertisement was stops to cover mares and thus farmers in the area could obtain mules, with a price range between £ 2 to £ 5, it varied depending on the services added to the mares and the number of mares per farmer.
But they also became part of shows, such as at the Coogee Palace Aquarium in Sydney.
And did they call them Platero or Rucio? Well, I haven't seen him, they used other names, Don Pedro, Don Carlos, Jenny, Don Cesar, Don, Don John
Australia also arrived, one of the definitions in the Spanish dictionary of the word burro, person brute, uncivil, rude, in 1888 in several newspapers they published the following: “There’s a Spanish donkey in North Queensland. He is father of 13 mules. Most of them are in Parliament”. “North Queensland brags of a Spanish donkey which is the sire of 13 mules. Most of them are in Parliament, and the rest are running newspapers in the Griffith interest “,Things do not change and are similar in almost all places.
Unfortunately with the words, Spanish donkey, a torture machine has been known.
To finish, I have tried to place through red marks, on a map of Australia, including the island of Tasmania, and New Zealand, the places where I have found references that there was Spanish donkeys, which I have also left written.
Lindo homenaje a esos borricus que se fueron tan lejos, y a los queridos Platero y el Rucio. Gracias José!
ResponderEliminarGracias a ti Margarita por leerme.
Eliminar¡Ah qué entrada interesante y curiosa nos compartes en tu blog, José! Desconocía este episodio de la historia económica de España y la estima así como la calidad del ganado asnal español. Narración entretenida acerca de la exportación de estos animales con el sensible recuerdo de dos muy famosos en nuestras letras, el rucio de Sancho y Platero de Juan Ramón ¡Gracias!
ResponderEliminarMary gracias por sus palabras y por leerme.
EliminarBuenos días José: muy trabajado el artículo. Es una lectura muy entretenida y muy bien enlazada con las fotografías. Lástima que sea un animal que no hemos sabido apreciar en estos tiempos, ya que han sido el sustento de muchas familias hasta no hace tanto tiempo. ¡Enhorabuena! Intentaré leer todos los artículos que pueda.
ResponderEliminarJuan Jesús, gracias por leerme y por tus palabras, creo que España, es propensa a olvidar y apreciar poco. Si lees más post, espero que te gusten.
Eliminar