No, no estamos en el puerto de Valencia o en el de Barcelona, esperando montar en una galera que nos lleve por el Mediterráneo y el Atlántico, hasta un puerto de la Costa Verde, estamos en Madrid.
En Español, Galera, aparte del famoso barco de remos, tiene una acepción que es “Carro grande de cuatro ruedas para transportar personas, ordinariamente con cubierta o toldo de lienzo fuerte” (RAE), en el diccionario de 1783 y alguno del s. XIX, la definición era un poco diferente “Carro grande de cuatro ruedas, que tiran algunos pares de mulas, para llevar mucha carga, y regularmente va por la parte de arriba cubierta de cañas en forma de bóveda”, no se hablaba de viajeros, para visualizar una galera, permítame la comparación, nos puede recordar a las carretas vistas en las películas del Oeste.
A cualquiera que conozca un poco de geografía física de España, una de las características de Asturias, es su abrupta orografía, y el acceso a la Meseta conlleva un enorme esfuerzo, los primeros que realizaron caminos para salvar la Cordillera fueron los Romanos, sus dos vías fundamentales hacia León, Carisa y Mesa, aunque hay que decir que el experto en ingeniería romana Isaac Moreno Gallo no las considera vías romanas, Carisa (entre los puertos de Pajares y San Isidro), y la del puerto de la Mesa (entre los puertos de Somiedo y Ventana), usada durante siglos principalmente fuera de la época de las nieves, llegando a ser propuesta como posible nueva carretera de Castilla, e incluso como entrada del ferrocarril hacia Asturias (Pedro María Hidalgo, abogado, político Leonés), lo que no tuvieron estas vías era un mantenimiento.
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En el Itinerario Español o Guía de Caminos de José Matías Escribano de 1760, el camino desde Madrid hacia Oviedo, era de ruedas hasta la ciudad de León, después era de herradura (para caballerías) y en Villamanin se dividía en dos, uno hacía Cangas de Tineo (hoy Cangas del Narcea) a través del puerto de Leitariegos, el itinerario lo llama puerto de Brañas y Braña de Arriba y Abajo, los habitantes de Leitariegos tenían ciertos privilegios, por la obligación de ayudar al viajero, en invierno sobre todo, la zona llegó a ser Concejo, aunque hoy pertenece al de Cangas del Narcea, en la guía de 1790 el camino llegaba a Ribadeo; y otro hacia Oviedo por Pajares, para la guía, Asturias no empezaba pasado el puerto, sino antes de Pola de Gordon (León), en siguientes reediciones vario un poco los limites pasando a estar entre Pola y Buiza, es verdad que eclesiásticamente todavía en 1892 estos lugares a partir de la Pola pertenecían al Obispado de Oviedo, hoy la carretera no pasa por Buiza, sino que desde Villasampliz se va más directo hacia Gordón, todavía para llegar al puerto quedaría Villamanin, Busdongo, Arbas, Colegiata de Arbas y el puerto, que ya en aquellos tiempos a veces se nombraba como la Perruca, nombre que después llevaría el túnel ferroviario que lo atraviesa. Es curioso leer el nombre que recibían ciertas localidades para estas guías, y las distancias, la de Santiago López de 1818, aparece Puente de los Herreros (Puente los Fierros, Escribano lo llamaba Puente de Hierros), Pola de Elena (Pola de Lena), Bujo (Ujo), y la distancia entre Madrid a Oviedo había 76 leguas (423,525 Kms.), para Escribano eran 82 leguas (456,961 Kms.), llegando a Oviedo por San Esteban de las Cruces, y por la calle Magdalena hasta la plaza del Ayuntamiento, este trazado se continuo usando hasta más allá de los años 50 del s. XX, en la Guía turística de España de Manuel Carballo de 1952, Oviedo – Madrid eran 447 Kms.
En 1807, un Leonés escribía una carta a un periódico de Madrid, en la que indicaba que “Yo tuve la curiosidad de verla, y pase en coche hasta la villa de la Pola (Pola de Gordón), distante más de 5 leguas (27,863 Kms.), donde están los últimos trabajos de la parte de acá del puerto de Pajares, pues por la de allá, según me informaron, hay algunas leguas de camino ya concluidas.”.
El 27/06/1822, el diputado por Asturias, José Canga Argüelles (Oviedo 11/07/1771 – Madrid 02/12/1842), presentó en el Congreso una proposición, “Pido a las Cortes que igual resolución que se acordó para el Canal de Campos, se extienda a la construcción o más bien a la conclusión de la carretera de Asturias a León”. Cómo sería la situación viaria de Asturias en ese momento, que con otros diputados asturianos (Agustín Argüelles, Rafael del Riego), pedía se declarara nacional y con una pronta construcción el camino por la costa entre Irún (País Vasco) y Coruña (Galicia). E incluso se debatía en el Congreso, que hubiera otro posible paso de la Cordillera, el 26/06/1821, ya se había pasado a la Comisión de Caminos y Canales, del Congreso de los Diputados con urgencia, los planos del camino proyectado desde la Vega de los Viejos (León, en la actual carretera del puerto de Somiedo), hasta San Esteban de Pravia (Asturias), con un coste de 8 millones de reales (2 millones de pesetas), en la guía de Correos de 1830, este camino era de herradura, igual que el de Leitariegos y también el de Tarna y llevaban a Oviedo. Y en ese año concretamente en el mes de diciembre, una asociación de propietarios y corporaciones del Bíerzo (León) pedían a Fernando VII (Escorial – Madrid 14/10/1784 – Madrid 29/09/1833) pedían que se hiciera una comunicación con el Principado de Asturias, ya que la carretera principal de Castilla a Galicia pasaba por la parte más despoblada de la zona, y no podían dar salida a sus productos agrícolas, un camino proyectado hasta Campomanes (Asturias), a través del puerto de la Cubilla (entre Pajares y Ventana), y unirse a la carretera que iba desde Oviedo a León, también daban otra opción rara para llegar hacia Oviedo que era Leitariegos, y que se escogiera la más ventajosa. El 10 de Setiembre de 1884, se remitió al Gobierno Civil de Oviedo, el proyecto de la Sección de carretera de Campomanes a Ia estación del ferrocarril, en el citado pueblo, correspondiente a la carretera de tercer orden, de la referida estación a la de León a Caboalles (León) por el valle de Huema y el puerto de Cubilla.
En marzo de 1829, El Emigrado Observador y la Gaceta de Bayona, decían respectivamente “Esta ya corriente la carretera que conduce desde Gijón en Asturias a León” y “..la que se ha abierto con Castilla por la nueva carretera de León al puerto de Gijón, nos hace disfrutar de las utilidades que proporciona el transito diario de infinitas carretas y recuas, que conducen trigo con ocasión de la escasez de granos en Inglaterra. Desde el mes anterior ha tomado un impulso extraordinario este transporte….La carretera es magnífica, y es lástima que no se concluya la media legua (2,786 Kms.) que falta en los confines de estas 2 provincias, en lo más elevado del puerto Pajares, cuyo paso se obstruye cuando hay grandes nevadas”.
La Guía General de Correos, Postas y Caminos de 1830, recordar que en aquellos años los caminos dependían de la Dirección General de Correos y Caminos, en el camino general de Madrid a Gijón por Valladolid, León y Oviedo, nos dice que faltaba por construir el trozo comprendido entre Olmedo y León, y perfeccionar algunas obras del Puerto de Pajares, que separaba León de Asturias, las posadas principales eran Guadarrama, San Rafael, Labajos, Olmedo, Valladolid, Medina de Rioseco, León y Oviedo. En el tramo de León a Gijón, nos dice que había 2 portazgos (lugar donde se pagaba el portazgo, un impuesto de paso, podríamos decir como los actuales peajes) uno en Puerto de Pajares y en Gijón, se suponía que iban destinados al mantenimiento de dichos caminos, ya el 10/04/1821 se aprobó que se pasase a la Comisión de Hacienda y de Caminos y Canales del Congreso, el expediente del establecimiento de un portazgo en Puente de Alba (2 kms. al norte de La Robla – León) con el oficio y tabla de arancel que había presentado el arquitecto-director de la carretera de Asturias, acompañando también del informe de la Dirección General de Correos, hoy el portazgo no está muy lejos (Huerna), y ¿quién sabe en el futuro?. Como hemos leído había cambiado un poco el itinerario ahora pasaba por Valladolid, y su distancia hasta Gijón era de 81 leguas (451,389 Kms.), 77 (425,600 Kms.) a Oviedo. El 13 de junio de 1834, se publicaba que la obra ejecutada en 1833 en la carretera a cargo de junta y particulares del confín de León a Gijón, tanto en conservación como obra nueva ascendía a 149.522 reales (37.380,50 pesetas) y entre León y el confín de Asturias solo hubo obra nueva, 320.000 reales (80.000 pesetas). Santos Madrazo Madrazo dice que es probable que a finales de 1834 se hubiera terminado.
Es curioso en su edición de 1775, Escribano, diferenciaba a los de Asturias que seguían en el mesón de la Madera y los de Oviedo que paraban en los 3 de los Maragatos de la calle Segovia. (Maragato apodo de los Astorganos)
En 1817, ya se anunciaba en Madrid la existencia de un coche con retorno a Oviedo y su carrera (era camino real o camino que va de una parte a otra), se encontraba en el Mesón de los Maragatos, en la calle Segovia, este coche fue habitual en los siguientes años, incluso en 1820 hubo una tartana que saldría de la cava de San Miguel, no solo retornaba hacía Oviedo, sino que se ofrecía a cualquier otro pueblo asturiano, lugar que con los años se establecerían negocios cárnicos de asturianos de origen Vaqueiro (Gallo Lechuga, Riesgo), aunque la carne asturiana ya llegaba ese año a la Corte por su propio pie, en julio llegó a Madrid una partida de vacuno, el dueño vendió en dos cajones uno en la plaza de Santo Domingo y en la Red de San Luis (Hoy Montera con Gran Vía), el precio fue cuartos (No llegaba a 0,25 pesetas) la libra (0,460 Kg.), incluso se publicitó con carteles. La noche del 6 de julio los teatros de Madrid, la Cruz recaudó 5.149 reales (1.287,25 pesetas), el Príncipe 3.742 reales (935,50 pesetas, no existía la peseta como moneda patrón, nacería en 1868).
En 1829 surgen otros lugares de salida de carruajes que iban y venían, en la fonda Europa, en la calle de Peregrinos, 23 (Hoy, esta calle no existe, estaba en la zona de la plaza Celenque y calles Tetuan y Arenal). Y aparecen los servicios con galeras.
Asturias no tuvo servicios de diligencias desde Madrid hasta más adelante, aunque en 1832 se hablaba de un almacén de la diligencia de Asturias en la plaza de San Miguel, era más relacionado con mercancías que con pasajeros, un editorial de la Revista Española, afirmaba que Coruña, Asturias y Murcia no tenían este servicio, aunque en este último caso en 1830 un compañía de diligencias ofertaba viaje desde Cartagena a Albacete donde enlazar con la Reales Diligencias – Correo, línea Madrid – Valencia.
En España, nacieron en 1769, uniendo Madrid con los Reales Sitios, después fueron apareciendo y desapareciendo compañías y líneas, en 1820 se produce una gran discusión si se las debía aprovechar para el transporte del correo, y tuvieron conflicto por competencia desleal con las llamadas sillas-correo, llevaban el correo general y podían ofrecer asientos a viajeros, según la época 4 o 6, se intentó resolver con Reales Ordenes en 1849, que fijaban solo la oferta de 2 asientos al precio de 5 reales – legua (1,25 pesetas – 5,5727 Kms.) y a cargo de conductor mayoral con un sueldo anual de 6.000 reales (1.500 pesetas), no se mencionaba quien se hacía cargo del pago de las agujetas, que había tanto en una como otra, era la propina al postillón, el mozo que iba a caballo por delante para guiarlos, es verdad que ya en esa época los caminos estaban un poco más delimitados. Por ejemplo en 1873 La Madrileña hacía el servicio de correo a Oviedo y Luarca.
Las galeras se dividían en ordinarias (tenían regularidad) y otras llamadas corsarias, aunque no existía una definición clara sobre ellas, incluso existieron las aceleradas, en la calle de Toledo, posada de Ocaña, salía una que se vanagloriaba de que era tirada por 7 mulas, y su carrera o ruta era por Arévalo, Medina del Campo, Tordesillas, Rueda, Rioseco y León, en 1830 cambió su salida pasando al mesón del Rincón, en la calle Alcalá, admitía como todas asientos o pasajeros y arrobas. Podríamos decir que estos mesones y posadas, se convirtieron en las estaciones de autobuses de la antigüedad. En Maragatos estableció su servicio la de José Molina, que con el tiempo cambio el Norte por el Sur, y presto servicio a Córdoba, Sevilla, Cádiz y su carrera.
En 1831 nace el servicio ordinario a Oviedo, que salía del parador de San Bruno (mesón), en la calle Alcalá. Estos servicios de galera como puede imaginarse el lector, era un servicio mixto de mercancías y pasajeros, se solía anunciar su llegada con uno o más días de antelación en los periódicos de la capital, y su carga, sidra, jamones de Avilés, Cangas, Muros, Grado, manteca de oso, incluso ostras frescas, desconozco el sistema para llevarlas, solían costar 1 pesetas la docena. Tal era así que a mediados del mes de Noviembre de ese año, una nueva empresa hizo el servicio de posta de pescado fresco desde Asturias, sus almacenes estaban en la calle de San Mateo esquina Fuencarral, no solo eran arrieros, vendían el pescado al por mayor y al por menor, y además ofrecían asiento para pasajeros con una arroba y media (17,253 Kgs.) de equipaje, salía desde Madrid domingo, martes y viernes a las 13:00 y desde Oviedo martes, jueves y sábado a las 20:00, ya parecía un servicio moderno con un horario preestablecido.
De San Bruno, siguió saliendo el ordinario y alguna otra galera, como aquella en que daba razón “El Moco” y a partir de 1832 el ordinario iba por Valladolid. De ahí fueron saliendo la de Mateo Campillo (que hizo servicios a Murcia) o la de Ramón González, en 1837 de San Bruno también saldría la galera de Juan Ferrer el Noy, incluso llegó a usar otro modelo de carruaje, el faetón (Era un coche de caja prolongada y con muchos asientos en los costados), todavía en 1842 se cogía la de Esteban Cabello. Ese año en la misma calle había un nuevo ordinario desde Madrid, en el parador de la Encomienda, y también hubo galera en la calle Concepción Jeronima, 7. A partir de ese año llegaba a Montera, 45, en la posada Gallega Vieja, y la galera de Blas García salía de la posada Nueva en la misma calle. Todavía en 1857 se hablaba de galera a Oviedo desde Infantas, 12. O en el 62, Andrés Álvarez hacia Oviedo y Avilés, sí, había ido a llevar jamones de Avilés. Un año después, 2 carruajes desde Peñón, 1 taberna esquina Santa Ana, hacía Oviedo 80 reales (20 pesetas), 10 (2,5 pesetas) la arroba.
A partir de 1849, ya no se hablaba de galeras, y aparecieron otros términos, las mensajerías fijas (la galería o carro que hacía viajes periódicos a puntos determinados), y empezaban las diligencias a Asturias, aunque todavía quedaba algún coche suelto con retorno, en la posada la Torrecilla, en la calle Toledo, 108, en 1847 el ordinario llegaba a la Posada Alcalá en la calle Infantas, 29. Las mensajerías fijas a Oviedo y Gijón salían de Alcalá, 22 frente a la Historia Natural, y ya anunciaba el precio del asiento que estaba entre 100 y 120 reales a Oviedo (25 – 30 pesetas) y con manutención eran 240 reales (60 pesetas). En 1862 nace el servicio mixto de Manuel Sotillo, con Transporte de Mensajería Aceleradas, salía cada 2 días desde Oviedo, tardando 5 días, a 120 reales el asiento y 10 reales arroba, y admitía cargamentos a cualquier parte de España, salía de la calle San Roque, 1, casa de Plácido Lesaca - Oviedo. Se uniría con Diligencias de Unión Asturiana, para hacer servicio hacía Asturias desde León al llegar el ferrocarril a dicha ciudad, y tenía galeras hacia ciudades gallegas.
Ese 1849 el servicio de diligencias lo ofrecía Navarra de Diligencias, desde Alcalá, 16, empezó haciendo un servicio a Oviedo cada 4 días, y pasó a cada 2, y asegurando que el viaje se hacía sin interrupción en 2 días 10 horas (Madrid – Valladolid 22 horas, Valladolid – León 16 horas, León – Oviedo 20 horas), sonaban muy bien estos tiempos, teniendo en cuenta, que en 1825 desde Santander, que ya tenía carretera con Madrid en el s. XVIII, una galera corsaria salió el 12 de enero y llegó a Madrid el 21, y compare el lector, con los datos en 1850 de Transportes Acelerados de la Unión, que era un servicio mixto, Madrid – Irún 6 días y medio y a San Sebastián 6 días y un cuarto. Las Diligencias Leonesas hacían Oviedo – León en 14 horas a 120 reales, en 1862.
Quizás nos sirva para hacer una comparación, el 20 de noviembre de 1854 la Gaceta de Madrid (actual Boletín Oficial del Estado) publicaba el itinerario, distancias, y tiempo del servicio de correo.
Durante el s. XIX, se produce un cambio en las comunicaciones terrestres, con la apertura de las líneas ferroviarias, y entonces surgen las combinaciones, diligencia y tren, según se iban abriendo secciones desde Madrid, por ejemplo, en 1861 todavía el ferrocarril no había salvado el Guadarrama, y la compañía Norte y diligencias Mediodía de España, ofrecían un servicio a Oviedo, en diligencia hasta San Chidrian (Ávila) hasta Valladolid en tren y de ahí en diligencia a Oviedo, era cada 2 días; en 1864, ya Diligencias La Castellana, ofrecía berlina desde León a Oviedo con 1ª clase en ferrocarril a 320 reales (80 pesetas), 2ª 270, 3ª 220; interior con 1ª 300 reales (75 pesetas), 2ª 250, 3ª 200; no fue la única, estaban La Victoria Castellana, La Ferro-carrilana empresa que en Pajares tuvo algún accidente por ejemplo entre el 17 – 18 de julio de 1866, con un vuelco, y donde tenía puesto de caballos, alguno requisado en la última Guerra Carlista (1872-76), hizo servicios por Asturias y hacia Galicia durante muchos años, con gran competencia con La Luarquesa, incluso con choques entre sus carruajes literalmente, dentro de Asturias, antes de 1840 ya había el coche de Gijón, que hacía el servicio con Oviedo, a partir de agosto de ese año tuvo competencia, la nueva transportaba máximo 11 viajeros entre interior y exterior, hacía el recorrido en 2 horas y media, y salía a las 6:00 de Gijón y a las 16:00 de Oviedo.
En 1877 la Compañía Ferrocarriles del Noroeste de España, también ofrecía un servicio mixto ya que todavía no estaba terminado el tramo del puerto, desde Busdongo (León) a Pola de Lena (Asturias), en este caso los equipajes iban en otro carruaje, así evitar los vuelcos en el puerto, un año después la compañía quebró, las peripecias de este tramo del viaje, las contó el jurisconsulto, político y diputado por Asturias, Rafael María de Labra Cadrana (La Habana – Cuba 07/09/1840 – Madrid 16/04/1918), en su libro “De Madrid a Oviedo”, viaje que tuvo lugar en 1880, siendo para él, el retraso en la apertura una de las pérdidas de competitividad de la costa Asturiana respecto a Santander, San Sebastián, aunque también añadía otros factores que eran los precios altos y las pocas comodidades para el viajero dentro de Asturias. La obra del puerto no se acabaría hasta 1884, por la Compañía de los Ferrocarriles de Asturias, Galicia y León, y empezó a prestar el servicio de Gijón a Madrid su primer cuadro de marcha, era el tren expresso miércoles y sábados de Gijón y lunes y jueves de Madrid salida 14:10 llegada 11:14 del día siguiente, tren correo Gijón 4:45 llegada a Madrid 21:30, al año siguiente la compañía fue absorbida por la compañía Caminos de Hierro del Norte de España, por eso la gente mayor llamaba a la estación de la calle Uría de Oviedo, estación del Norte, en 1890 tenía los siguiente hora de salida y llegada, Expresso Gijón 14:40 – Madrid 10:00 63,10 pesetas, Correo 10:10 – 9:20 47,25 pesetas, Mixto 15:05 – 19:55 (día siguiente) 28,35 pesetas. Pero parece que la apertura no significó una mejora de la calidad del transporte, en alguna mercancía con respecto al sistema antiguo, ese año de la inauguración, hubo una queja en la prensa por el transporte en tren del ganado vacuno hasta Madrid, que llegaba sin ser apto para el consumo, ya que tardaba 4 días, hacinado, con falta de comida y agua, y grandes paradas en el camino, 12 horas en León, 15 en Palencia, 10 en Venta de Baños, 12 a 14 en Valladolid.
Hoy la concesión del transporte de viajeros desde Asturias a Madrid, es de Automóviles Luarca, S. A., el 04/07/1964 empezó servicio desde Gijón, y tardaba 9 horas por el puerto de Guadarrama y 8 si pasaban por el túnel.
Y que sería de una historia de diligencias, sin bandidos, bueno tratándose de la España del s. XIX, de bandoleros, pues en la carrera de Oviedo, se relacionó con uno de los bandoleros más famosos, Luis Candelas Cagigal, (Madrid 09/02/1804 – Madrid 06/11/1837), pero no debido a algún asalto, sino siendo pasajero de la tartana a Oviedo, o acompañando algún allegado en la galera, y adelantándose a caballo para dar aviso de su llegada en alguna posada como si hiciera de postillón. Candelas terminó viéndoselas con la justicia, y su pena no fue remar en galeras, ni terminar en una galera, ya que era una cárcel para mujeres, sino ajusticiado. En Oviedo, desde s. XVIII hubo una galera, sita en la zona de la actual Plaza de la Escandalera, frente al teatro Campoamor, incluso algunos atribuyen el nombre de la plaza ha dicho establecimiento, por el ruido que hacían las reclusas, escandaloso podríamos decir, que fue el tiempo que llevó su venta, ya que hubo que hacer varias subastas, durante varios años, a principios del s. XX. Llegó a coincidir un tiempo con la oficina de Diligencias Maurines, que hacía la línea Oviedo - Tineo y vendían asientos para Tineo - Madrid y viceversa, que estaba en la calle San Francisco (donde está el edificio histórico de la Universidad de Oviedo), y también al otro lado, mucho tiempo en la calle de detrás del teatro Campoamor, pero en la parte de abajo, del edificio conocido como la jirafa (donde estuvo el mercado del Progreso), tuvo salida el ALSA (Luarca 1923). Galera procedente de Madrid dársena….
I apologize for my English
No, we are not in the port of Valencia or Barcelona, waiting to boat a galley that take us across the Mediterranean and the Atlantic, to a port on the Green Coast, we are in Madrid.
In Spanish, Galley, apart from the famous rowing ship, has a meaning that is "Large four-wheeled cart to transport people, usually with a strong canvas cover or awning" (RAE), in the dictionary of 1783 and some of the 19th, the definition was a little different "Large four-wheeled cart, pulled by a few pairs of mules, to carry a lot of load, and regularly covered with reeds in the shape of a vault", there weren't mention of travelers, To visualize a galley, allow me the comparison, it can remind us of the wagons seen in Western movies.
To anyone who knows a little about the physical geography of Spain, one of the characteristics of Asturias is its abrupt orography, and access to the Plateau entails an enormous effort, the first to make roads to save the Mountain Range were the Romans, their two fundamental routes to León, Carisa and Mesa, although it must be said that the Roman engineering expert Isaac Moreno Gallo do not consider them Roman roads, Carisa (between the Pajares pass and San Isidro pass), and that of the La Mesa pass (between the Somiedo pass and Ventana pass), Mesa was used for centuries mainly outside the snow season, becoming proposed as a possible new road of Castilla, and even as a railway entrance to Asturias (Pedro María Hidalgo, lawyer, Leonés politician), what these roads did not have, was maintenance.
In the end, it was decided, the realization of a road between León and Oviedo, and the person in charge of choosing the place of passage was Marcos de Vierna, he chose Pajares, it was known as the Castilla road, it was 1770, the work was extended in time, despite having been under the command of Jovellanos (Gijon January 5, 1744 – Puerto de Vega – Navia – Asturias November 27, 1811) for a few years, the works were eternalized, and a written record of that remained.
In 1807, a Leonés wrote a letter to a Madrid newspaper, in which he said that, “I was curious to see its, and I went in carruage to the localitily of the Pola (Pola de Gordón), more than 5 leagues distant (27.863 Kms.), Where are the last works of the part of here of the Pajares pass, because for the one of there, according to they informed me, there are some leagues of road already concluded.".
On June 27, 1822, the deputy for Asturias, José Canga Argüelles (Oviedo July 11, 1771 - Madrid December 2, 1842), presented in Congress a proposal, “I ask the Cortes that the same resolution that was agreed for the Campos Canal, extends to the construction or rather to the conclusion of the road from Asturias to León ”. What would the road situation of Asturias be like at that time, that with other Asturian deputies (Agustín Argüelles, Rafael del Riego), asked to be declared national and with a prompt construction of the road along the coast between Irún (Basque Country) and Coruña (Galicia). And it was even debated in Congress, another possible passage of the Mountain Range, on June 26, 1821, the plans of the road projected from the Vega de los Viejos (León, on the current road to the Somiedo pass) to San Esteban de Pravia (Asturias), they had already been passed to the Road and Canals Commission of Congress with urgent, its cost 8 million reales (2 million pesetas), in the 1830 postal guide, this path was a bridle path, the same as that of Leitariegos and Tarna pass and led to Oviedo. And in that year specifically in the month of December, an association of owners and corporations of the Bíerzo (León) applied to Fernando VII (Escorial - Madrid October 14, 1784 - Madrid September 29, 1833) that a communication was made with the Principality of Asturias, since the main road from Castilla to Galicia passed through the most unpopulated part of the area, and they could not give outlet to their agricultural products, a road projected to Campomanes (Asturias), through La Cubilla pass (between Pajares and Ventana), and joining the road that went from Oviedo to León, also gave another rare option to get to Oviedo, which was Leitariegos, and that the most advantageous was chosen. On September 10, 1884, the project for the Campomanes Road Section to the railway station in the aforementioned town was sent to the Civil Government of Oviedo, corresponding to the third-order road from that station to that of León to Caboalles (León) through the Huema valley and the port of Cubilla.
In March 1829, El Emigrado Observador and the Gaceta de Bayona, said respectively, "The road that leads from Gijón in Asturias to León is now current" and "... the one that has been opened with Castilla by the new road from León to the Gijón harbour, makes us enjoy the utilities provided by the daily traffic of infinite carts and trains, driving wheat on the occasion of the grain shortage in England. Since the previous month, this transport has taken an extraordinary impulse… .The road is magnificent, and it is a pity that the half league (2.786 km) that remains in the confines of these 2 provinces, at the highest point of the Pajares pass, is not completed. , is obstructed when there are heavy snowfalls.. ”.
The General Guide of Posts, Relays and Roads of 1830, to remember that in those years the roads depended on the General Directorate of Posts and Roads, on the general path from Madrid to Gijón through Valladolid, León and Oviedo, tells us that there was still to be built the section between Olmedo and León, and to perfect some works in the Pajares Pass, which separated León from Asturias, the main inns were Guadarrama, San Rafael, Labajos, Olmedo, Valladolid, Medina de Rioseco, León and Oviedo. In the section from León to Gijón, he tells us that there were 2 portazgos (a place where the portazgo was paid, a pass tax, we could say like the current tolls) one in Pajares pass and in Gijón, it was supponed, that they were destined to the maintenance of said roads, already on April 10, 1821. It was approved that the file of the establishment of a gate in Puente de Alba (2 km north of La Robla - León), was passed to the Commission of Finance and Roads and Canals of Congress, with the office and tariff table that had presented the architect-director of the Asturias road, also accompanied by the report from the General Post Office, today the portazgo is not far away (Huerna - toll motorway), and who knows, in the future. As we have read, the itinerary had changed a bit, now it passed through Valladolid, and its distance to Gijón was 81 leagues (451.389 kms.), 77 (425.600 kms.) to Oviedo. On June 13, 1834, it was published that the work carried out in 1833 on the road by the board and individuals from the border of León to Gijón, both in conservation and new construction amounted to 149,522 reales (37,380.50 pesetas) and between León and the border of Asturias there only was new construction, 320,000 reales (80,000 pesetas). Santos Madrazo Madrazo says that it is probable that by the end of 1834 it was finished.
It is curious in its 1775 edition, Escribano, differentiated those from Asturias who were still at the Madera inn and those from Oviedo who stopped at the 3 de los Maragatos on Segovia street. (Maragato, nickname, inhabitants of Astorga – Leon).
In 1817, the existence of a car returning to Oviedo was already announced in Madrid and its career (it was a royal road or a road that goes from one part to another), was at the Maragatos inn, on Segovia street, this car was common in the following years, even in 1820 there was a tartana (small cart) that would come out of the San Miguel cava, not only came back Oviedo, but also offered to any other Asturian town, a place that over the years would establish Asturian meat businesses from Vaqueiro origin (Gallo Lechuga, Riesgo), although Asturian meat already arrived at the Court that year by its own foot, in July a consignment of beef cattle arrived in Madrid, the owner sold one in the Santo Domingo square in two drawers and in the Red San Luis (Today Montera with Gran Via), the price was quarts (It did not reach 0.25 pesetas) per pound (0.460 Kg.), it was even advertised with posters. On the night of July 6, the theaters of Madrid, the Cross collected 5,149 reales (1,287.25 pesetas), the Prince 3,742 reales (935.50 pesetas, the peseta did not exist as the standard currency; it would be born in 1868).
In 1829, other places of departure for carriages that came and went appeared, in the Europa inn, in the Peregrinos street, 23 (Today, this street doesn’t exist, it was in the zone of Celenque square, Tetuan street, Arenal street). And the services with galleys appeared.
Asturias didn't have stagecoach services from Madrid until later, although in 1832 there was talk of a warehouse of the Asturias stagecoach in the San Miguel square, it was more related to merchandise than with passengers, an editorial in the Revista Española , stated that Coruña, Asturias and Murcia did not have this service, although in the latter case in 1830 a stagecoach company offered a trip from Cartagena to Albacete where it could connect with the Reales Diligencias - Correo, Madrid - Valencia line.
In Spain, they were born in 1769, uniting Madrid with the Royal Sites, then companies and lines began to appear and disappear, in 1820 there was a great discussion if they should be used for the transport of mail, and they had conflict due to unfair competition with the named, chairs-mail, carried the general mail and could offer seats to travelers, according to the period 4 or 6, an attempt was made to resolve with Royal Orders in 1849, which fixed only the offer of 2 seats at the price of 5 reales - league (1.25 pesetas - 5.5727 Kms.- 3.462 miles) and in charge of the mayoral driver with an annual salary of 6,000 reales (1,500 pesetas), it was not mentioned who was in charge of paying the DOMS (agujetas), which therer were both in one and the other, it was the tip to the postillon that he was riding ahead to guide them, it is true that at that time the roads were a little more delimited. For example, in 1873 La Madrileña did the mail service to Oviedo and Luarca.
The galleys were divided into ordinary ones (they had regularity) and others named corsairs, although there was no clear definition about them, there were even accelerated ones. In the Toledo street, Ocaña inn, there was one that boasted that it was pulled by mules, and his career or route was through Arévalo, Medina del Campo, Tordesillas, Rueda, Rioseco and León, in 1830 he changed his departure passing to the Rincón inn, on Alcalá street, he admitted as all seats or passengers and arrobas (old weigh unit). We could say that these inns became the bus stations of ancient times. In Maragatos, José Molina established his galley, who over time changed the North for the South, and served Cordoba, Seville, Cadiz and his career.
In 1831 the ordinary service to Oviedo was born, leaving the San Bruno parador (inn), on Alcala street. These galley services, as the reader can imagine, was a mixed service of goods and passengers, their arrival was usually announced one or more days in advance in the capital's newspapers, and their cargo, cider, hams from Avilés, Cangas, Muros , Grado, bear butter, even fresh oysters, I don't know the system to carry them, they used to cost 1 pesetas a dozen. Such was so that in the middle of November of that year, a new company made the fresh fish posta (transport) service from Asturias, their warehouses were on the sSan Mateo street on the corner of Fuencarral, they were not only muleteers, they sold the fish at wholesale and retail, and also offered seats for passengers with one and a half arroba (17.253 Kgs.) of luggage, it left Madrid Sunday, Tuesday and Friday at 13:00 and from Oviedo Tuesday, Thursday and Saturday at 20:00, it already seemed like a modern service with a pre-established schedule.
From San Bruno, the ordinary and some other galley continued to leave, like the one in which "The Mucus" gave reason, and from 1832 the ordinary went through Valladolid. From there the one of Mateo Campillo (who also did services to Murcia) or that of Ramón González left, in 1837 from San Bruno the galley of Juan Ferrer el Noy would also leave, he even used another model of carriage, the faeton (It was a car with long box and with many seats on the sides), still in 1842 the one of Esteban Cabello was taken. That year in the same street there was a new ordinary from Madrid, at the Encomienda Parador (inn), and there was also a gallery on Concepción Jeronima, 7 street. From that year on, it would arrive at Montera street, 45, at the Gallega Vieja inn, and Blas García's galley was leaving the Posada Nueva (New inn) on the same street. Still in 1857 there was talk of a galley to Oviedo from Infantas street, 12. Or in 62, Andrés Álvarez to Oviedo and Avilés, yes, he had gone to carry Aviles hams. A year later, 2 carriages from Peñón, 1 tavern on the corner of Santa Ana, to Oviedo 80 reales (20 pesetas ), 10 (2.5 pesetas) arroba.
As of 1849, wasn't talked of galleys, and other terms appeared, fixed messaging (the gallery or carriage that made periodic trips to certain points), and stagecoaches to Asturias began, although there was still some loose cart with return, in the inn. Torrecilla, in Toledo street, 108, in 1847 the ordinary arrived at the Posada Alcalá in Infantas street, 29. The fixed messaging to Oviedo and Gijón left Alcalá street, 22 in front of Natural History, and already announced the price of the seat which was between 100 and 120 reales to Oviedo (25 - 30 pesetas) and with maintenance it was 240 reales (60 pesetas). In 1862 the mixed service of Manuel Sotillo was born, with Accelerated Messaging Transport, it left every 2 days from Oviedo, taking 5 days, at 120 reales per seat and 10 reales at arroba, and admitted shipments to any part of Spain, it departed from San Roque street, 1, the home of Plácido Lesaca - Oviedo. It would join with Union Asturiana Stagecoachs, to serve Asturias from León, when the railroad arrived at that city, and had galleys to Galician cities.
In 1849 the stagecoach service was offered by Navarra de Diligencias, from Alcalá street, 16, it began by doing a service to Oviedo every 4 days, and passed to every 2, and ensuring that the trip was made without interruption in 2 days 10 hours (Madrid - Valladolid 22 hours, Valladolid - León 16 hours, León - Oviedo 20 hours), these times sounded very good, taking into account that in 1825 from Santander, which already had a road with Madrid in the s. XVIII, a corsair galley left on January 12 and arrived in Madrid on 21, and compare the reader, with the data in 1850 of Transportes Acelerados de la Unión, which was a mixed service, Madrid - Irún 6 days and a half and San Sebastian 6 days and a quarter. The Leonesas Stagecoaches made Oviedo - León in 14 hours at 120 reales, in 1862.
Perhaps it will help us to make a comparison; on November 20, 1854 the Madrid Gazette (current Official State Gazette) published the itinerary, distances, and time of the mail service.
During the s. XIX, there is a change in terrestrial communications, with the opening of the railway lines, and then the combinations arise, stagecoach and train, according to sections were opened from Madrid, for example, In 1861 the railroad still had not saved the Guadarrama, and the Norte company and Mediodia de España stagecoaches offered a service to Oviedo, by stagecoach to San Chidrian (Ávila) to Valladolid by train and from there by stagecoach to Oviedo, it was every 2 days; in 1864, already La Castellana Stagecoachs, offered a berlina from León to Oviedo with 1st class by rail at 320 reales (80 pesetas), 2nd 270, 3rd 220; interior with 1st 300 reales (75 pesetas), 2nd 250, 3rd 200; it was not the only, were La Victoria Castellana, La Ferro-carrilana company that in Pajares had an accident, for example between July 17 - 18, 1866, with an overturn, and where it had a horse stall, some requisitioned in the last Carlist War (1872-76), did services in Asturias and toward Galicia for many years, with great competition with La Luarquesa, even with crashes between their carriages literally, within Asturias, before 1840 there was already the coche de Gijón, which did the service with Oviedo, as of August of that year it had competition, the new one carried a maximum of 11 passengers between inside and outside, made the journey in 2 and a half hours, and left at 6:00 from Gijón and at 16:00 from Oviedo.
In 1877, the Northwest Spain Railroad Company also offered a mixed service since the section of the pass was not yet finished, from Busdongo (León) to Pola de Lena (Asturias), in this case the luggage went in another carriage, to avoid tipping in the pass, a year later the company went bankrupt, the incidents of this section of the trip were told by the lawyer, politician and deputy for Asturias, Rafael María de Labra Cadrana (Havana – Cuba, September 07, 1840 – Madrid, April 16, 1918), in his book “From Madrid to Oviedo”, in this case the luggage went in another carriage, to avoid tipping in the pass, a year later the company went bankrupt, the incidents of this section of the trip were told by the lawyer, politician and deputy for Asturias, Rafael María de Labra Cadrana (Havana - Cuba September 07, 1840 - Madrid April 16, 1918), in his book “From Madrid to Oviedo”, The work on the pass would not be finished until 1884, by the Asturias, Galicia and León Railway Company, and it began to provide the service from Gijón to Madrid, its first gear chart, it was the express train on Wednesdays and Saturdays from Gijón and Mondays and Thursday from Madrid departure 14:10, arrival 11:14 the next day, Gijón mail train 4:45 arrival in Madrid 21:30, the following year the company was absorbed by the company Roads of Iron of the North of Spain, that is why the older people called the station on Uría street in Oviedo, North station, in 1890 had the following departure and arrival times, Expresso Gijón 14:40 - Madrid 10:00 63.10 pesetas, Correo 10:10 - 9:20 47.25 pesetas, Mixed 15:05 - 19:55 (next day) 28.35 pesetas. But it seems that the opening did not mean an improvement in the quality of transport, in some merchandise with respect to the old system, that year of the inauguration, there was a complaint in the press about the transport of cattle by train to Madrid , which arrived without being suitable for consumption, since it took 4 days, overcrowded, with lack of food and water, and large stops along the way, 12 hours in León, 15 in Palencia, 10 in Venta de Baños, 12 to 14 in Valladolid.
Passenger transport concession from Asturias to Madrid is from Automobiles Luarca, S. A., on July 04, 1964 it started service from Gijón, and it took 9 hours through the Guadarrama pass and 8 if they passed through the tunnel.
And that it would be a story of stagescoachs, without bandits, well in the case of the Spain of the 19th century, of bandoleros, thus in the career of Oviedo, he was related to one of the most famous bandits, Luis Candelas Cagigal, (Madrid February 09, 1804 - Madrid November 06, 1837), but not on account of some assault, but being a passenger from the tartana (cart) to Oviedo, or accompanying some close friend in the galley, and riding ahead to give notice of his arrival at some inn as if he were acting as a postillion. Candelas ended in the Justice, and his penalty was not rowing in galleys, or ending up in a galley, since it was a prison for women, but executed. In Oviedo, since 18th century there was a gallery, located in the area of the current Escandalera Square, in front of the Campoamor theater, some even attribute the name of the square to the establishment, because of the noise made by the inmates, scandalous we could say, that it was the time which took its sale, as several auctions had to be held, over several years, at the beginning of the 20th century. Some time came to coincide with the Maurines Stagecoachs office, which made the Oviedo - Tineo line and sold seats for Tineo - Madrid and vice versa, which was on San Francisco street (where the historic building of the Oviedo University is located), and Also on the other side, for a long time on the street behind the Campoamor theater, in the bottom, of the building known as the giraffe (where the Progreso market was), the ALSA (Luarca 1923) had its exit. Galley from Madrid dock….
José, me ha interesado mucho tu investigación sobre esa azarosa historia de caminos y vehículos del pasado hacia el norte asturiano, los mapas colaboran harto!
ResponderEliminarMuy buen aporte!, gracias por compartir tantos datos!
Margarita gracias por leerme, y por tus palabras, me alegro que le haya gustado
Eliminar¡Ah las galeras de cuatro ruedas!Cómo se entera una de cosas interesantes leyéndote, José. Lo más novedoso para mí ha sido saber que este transporte compartía nombre con las galeras marítimas. Ni qué decir de la cantidad de datos que nos revelas acerca del tránsito en la España de entonces. Te agradezco que nos compartas tus narraciones históricas.
ResponderEliminarMary me alegra, que te haya parecido interesante este texto. Muchas gracias.
EliminarMuy interesante José. Muchas gracias
ResponderEliminarGabriela gracias por leerme, y me alegro que te haya parecido interesante.
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