martes, 10 de agosto de 2021

Gato Español, de Imperio a abrigo
Spanish Cat, from Empire to coat


En ciertas localidades, pueblos, y ciudades de España, a parte, del gentilicio normal, que les corresponde a los nacidos en dicho lugar, se suelen usar otros, para llamar a sus naturales, y en ocasiones se trata de nombres de animales, por la importancia de la ciudad, el más conocido podría ser, gato, es el apelativo que reciben los de Madrid, cuenta la historia y la leyenda, que en el año 1083, durante el asalto de las tropas cristianas de Alfonso VI (¿? 1047 o 1048 – Toledo, 03/05/1109) a la ciudadela de Mayrit (Madrid), construida por los musulmanes, un soldado con la ayuda de una daga, ascendió las murallas y facilitó la conquista, al verlo el rey, dijo que era igual que un gato, y el joven tomo el apodo de gato.
Restos  de muralla árabe de Madrid (Foto – Ayuntamiento de Madrid)

Muchos siglos después, y desconociendo seguro la anterior leyenda, el nombre del felino, fue usado en la prensa de Estados Unidos, para referirse, no a la capital de España, sino que a la propia España, y en otro conflicto bélico, serán las Guerras de Cuba, en Diciembre de 1884, en la crónica sobre el panorama político, el Omaha Daily Bee (Omaha – Nebraska), se refiere a España, con la expresión Spanish cat (Gato Español), al escribir sobre una proposición de un tratado Hispano-Americano, del Senador por Nebraska, Charles H. Van Wyck (Dutchess County – New York 10/05/1824 – Washington D. C. 24/10/1895). La relación entre los dos países se fue tensando con el paso de los años. En 1897 en el momento que se estaba produciendo la sustitución del Embajador de Estados Unidos en Madrid y con la sede vacía, se produjo el asesinato Cánovas del Castillo (Málaga 08/02/1828 – Mondragón – Pais Vasco 08/08/1897), Presidente del Gobierno de España, y la prensa volvía a utilizar el término felino. En abril de 1898, ya la guerra entre los dos países, parecía inminente, y el Spanish cat, salía hasta en algún poema bélico que se publicaba en Washington D. C., la guerra empezaría el día 21, y en plena guerra en lugares tan insospechados como Globe (Arizona), antiguo territorio español, en una celebración, Master Harry Temple recitaba “Spanish cat”. Aunque había pasado un año, todavía una tienda de Brunswich (Georgia) ofrecía un juego llamado con esa expresión, y la siguiente frase, “un juego que juegan los escolares cubanos”. Pero el tiempo no significó el olvido, incluso en una situación rara, como al referirse al conflicto bélico entre la Republica Dominicana y Haiti, en 1914. En la II Guerra Mundial, una de las preocupaciones de los aliados, era la actuación de España con respecto a su neutralidad, y su apoyo a Alemania y se adhiriera a las naciones del Eje, era mayo de 1941, se hablaba de la conquista de Gibraltar y Portugal, y la situación de las Azores (Portugal) y lo que complicaría la situación de Gran Bretaña, y la ayuda que recibía de EEUU, aún quedaban meses para su entrada en la guerra, el periodista Thomas M. Johnson, volvía a usar el término en su crónica sobre el tema.
The Tacoma Times 31/05/1941 (Tacoma - Washington)

En todas las guerras hay prisioneros, y la de Cuba no sería menos, pero en esa hubo unos especiales, siguiendo los periódicos de EEUU, podemos saber de sus vivencias, en octubre de 1898, llegaba a St. Joseph - Michigan, a la casa del capitán Lloyd Clark, un gato, el gato fue enviado por su hermano Charles E., capitán del acorazado Oregón, el gato era uno de los dos rescatados del crucero-acorazado español Cristóbal Colón, llevaba una nota con una cinta con los colores de la bandera, la tarjeta decía, "A un buen americano, trátame amablemente, y dame de comer, ya que soy prisionero de guerra del Cristóbal Colón, siendo reenviado por la tripulación del Oregón al hermano del valiente comandante, Charles E. Clark, cuyos valientes esfuerzos obligaron al Cristóbal Colon a rendirse el 3 de julio de 1898 ". El gato no tuvo una vida larga en sus nuevas tierras, pero eso sí, no pasó desapercibido, participo en una exposición en Indianapolis, y en la 1ª exposición de gatos de Chicago, residiendo en el 4011, Drexel Boulevard, casa de la Sra. Leland Norton, y obteniendo en el certamen una medalla especial, a su regreso a casa en Benton Harbor (St Joseph – Michigan) fallecía, sin que se supiera la causa, era el 17/12/1898.
Walker Lake Bulletin 01/02/1899 - Hawthrone - Nevada

El otro fue a parar al Iowa por orden del capitán Bob Evans, en junio de 1899 el barco se encontraba en dique seco en la zona de Seattle (Washington) en Port Orchard, se podía ver acompañando a la mascota del acorazado, una cabra, bueno diremos que era gata, y tuvo descendencia, ese año en el mismo barco, uno de sus hijos fue el gato Rey Alfonso, que se quedó en Alameda (San Francisco – California), durante una visita del acorazado, entregado al ingeniero municipal I. N. Chapman, murió en noviembre de 1911, a manos de dos bulldogs franceses. En aquel junio en Seattle, también se podía visitar U. S. Revenue Cutter McCulloch, que estuvo en la batalla de Cavite (Manila – Filipinas, 01/05/1898) y que también, como no, tenía una mascota felina, era un gato español.
Parece que en aquellos tiempos, era habitual la estancia en los barcos de la armada Norteamérica, de animales, en enero de 1899, en  Nueva York, se encontraban el Indiana, Massachusetts y  Brooklyn, algún articulista los definió como zoos. El Indiana, tenía un cerdo, una cabra, cuatro gatos negros, un gato tigre, dos gatitos y un perro. El cerdo lo recogieron marineros en Guantanamo (Cuba), decían que el Oregón tenía otro y recogido del Cristobal Colón.  El Massachusetts, tenía una gallina, un gallo, una cabra, un perro mastín. El Brooklyn tenía su propio zoo, una cabra, un ciervo, un gato español, un gato yanqui y su familia, y un perro. El gato Español fue recogido del crucero María Mercedes, en Santiago de Cuba, le pusieron el nombre de Cervera, y le pusieron un collar con una placa “Cuba Libre”, aunque otras fuentes dicen que procedía del Vizcaya.
El buque insignia de la flota Española, era el crucero acorazado Infanta María Teresa, aunque el barco sufrió graves daños en la batalla, los Norteamericanos intentaron recuperarlo y llevarlo a su país, en el barco, según parece se había quedado un gato, que era del Almirante Cervera, fue recuperado por el teniente Hobson, remolcado por el Vulcan, desde Cuba a Charleston, en el trayecto al pasar cerca de las Bahamas, sufrieron una tormenta huracanada, y el capitán del barco, mandó abandonar el María Teresa, y cortar las amarras, pero el gato decidió continuar en el barco. Días después se vieron los restos de crucero, al conocer dicha información, Hobson mandó buscar el barco, pero ya no se podía recuperar, y también se envió al teniente Simms, para buscar el gato, y lo encontró, en una isla de las Bahamas, los nativos lo habían salvado y el jefe lo había regalado a su hijo, Simms tuvo que pagar 15 dólares al jefe para recuperarlo, ¿cómo se llamaba la isla?, sí, isla gato. El viaje de vuelta a USA, se hizo en el Vulcan, y nada más salir del puerto, el cielo se llenó de nubes y el barómetro bajo, entonces el capitán dijo que era el gato que era un demonio, una bruja y quería tirarlo por la borda, pero intervino Hobson, para salvarlo, y diciendo que “por la borda debería irse usted. Este gato nos ha dado a todos un ejemplo extraordinario de fidelidad. Se aferró a su barco cuando todos lo abandonaron. Solo estuvo de guardia durante dos semanas mientras el mar barrió su casco. Me ayudó a levantar el Teresa y la habría llevado hasta Charleston si no hubieras perdido los nervios y dejado el crucero a la deriva. Incluso a la deriva, durante todo el huracán, ese gato sabía exactamente dónde ir. ¿Sabes el nombre del cayo de coral a la que ese pequeño y valiente capitán puso su rumbo? Mira tu carta, es ¡Cat Island! ", era una gata y recibiría el nombre de María Teresa.
No solo hubo prisioneros gatunos en el mar, sino también en tierra, después de la toma de la loma de San Juan, apareció un gato, que debía de pertenecer a alguna de las familias españolas de la zona, y que recogió el mayor Alfred C. Markley, y le llamarón Supuello, por el poema de Rudyard Kipling que se cantaba por parte de las tropas, y volvió con él a su casa, Fort Douglas – Salt Lake City (Utah).
Contralmirante Richmond Pearson Hobson (Greensboro – Alabama 17/03/1870 – New York 16/03/1937)
Naval History and Heritage Command – United States
1898. Crucero María Teresa. Teniente Richmond Pearson Hobson escribiendo un informe sobre el estado del naufragio, él era el héroe del incidente de Merrimac en el puerto de Santiago

Los periódicos Norteamericanos, en el s. XIX, cuando hacían artículos sobre las distintas razas de gatos, en el caso del gato español, lo consideraban como un hibrido, que databa de las invasiones árabes, eran de colores negro, blanco, naranja apagado, era una raza muy apreciada, pero no como mascota o animal de compañía, sino como negocio, por su piel, en 1895, se anunciaba el establecimiento de una inmensa granja de cría de gatos en Cincinnati (Ohio). Se utilizarían 8 acres (32.374,9 m2) para los edificios y las instalaciones, y se criarían gatos hasta que su pelaje tenga la edad suficiente para tener un valor de mercado distinto. Los primeros ejemplares se importarían de España. A finales de segunda década y principios de la tercera del siglo XX, llegó a cotizar en mercados como Saint Louis o New York (09/04/1919 – 1,95 $, el gato salvaje de 1 $ a 13,50 $, de marta 127 $), y esas pieles acababan en abrigos.
New York Herald 22/01/1922

New York Evening 02/01/1926

The Glens Falls Times 06/08/1935 - Glens Falls - New York

Pero no quedó ahí la cosa, en periódicos de Nueva York, desde los años 50, aparecería enlos crucigramas como definición el término “Spanish cat”, unas veces en crucigramas alrededor del mundo, otros granjas de animales, otros gemas de Octubre.
Decía el Evening Star, de Washington D. C., en 1930, que en los países del Golfo de México, se decía que los Españoles eran famosos por esconder las cosas  y había un dicho, que una persona reservada es como un gato español, ya que los gatos españoles enterraban las baratijas……
También podríamos decir que muchos de esos que lo decían, algo de sangre española podían tener.

Bibliografía: Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos, Bibliotecas de Nueva York,


In certain localities, villages, and cities of Spain, apart from the normal gentilicio, which corresponds to those born in that place, others are often used to call their natives, and sometimes they are names of animals, for The importance of the city, the best known could be, cat, is the nickname that those of Madrid receive, it tells the story and the legend, that in the year 1083, during the assault of the Christian troops of Alfonso VI (? 1047 1048 - Toledo, May 03, 1109) to the citadel of Mayrit (Madrid), built by the Muslims, a soldier with the help of a dagger, ascended the walls and facilitated the conquest, when the king saw it, he said that he was just like a cat, and the young man took the nickname of cat.
Remains of the Arab wall of Madrid (Photo - Madrid City Council)

Many centuries later, and without knowing the previous legend for sure, the name of the feline was used in the United States press, to refer, not to the capital of Spain, but to Spain itself, and in another war conflict, it will be the Wars of Cuba, in December 1884, in the chronicle on the political panorama, the Omaha Daily Bee (Omaha - Nebraska), refers to Spain, with the expression Spanish cat, when writing about a proposal of a treaty Hispano-Americano, from the Senator for Nebraska, Charles H. Van Wyck (Dutchess County - New York October 05, 1824 - Washington DC October 24, 1895). The relationship between the two countries became increasingly fraught over the years. In 1897, when the United States Ambassador was being replaced in Madrid and with the headquarters empty, the Cánovas del Castillo assassination took place (Málaga February 08, 1828 - Mondragón - Basque Country August 08, 1897), President of the Government of Spain, and the press used the term feline again. In April 1898, already the war between the two countries seemed imminent, and the Spanish cat even appeared in some war poem that was published in Washington DC, the war would begin on the 21st, and in the middle of the war in places as unsuspected as Globe (Arizona), former Spanish territory, in a celebration, Master Harry Temple recited “Spanish cat”. Although a year had passed, a store in Brunswich (Georgia) still offered a game called with that expression, and the following phrase, “a game played by Cuban school boys". But time did not mean oblivion, even in a rare situation, as when referring to the war between the Dominican Republic and Haiti, in 1914. In World War II, one of the concerns of the allies was the performance of Spain with respect to to its neutrality, and its support for Germany and adhere to the Axis nations, it was May 1941, there was talk of the conquest of Gibraltar and Portugal, and the situation of the Azores (Portugal) and what would complicate the situation of Gran Britain, and the aid it were receiving from the United States, still had months to go before its entry into the war, the journalist Thomas M. Johnson, used the term again in his chronicle on the subject.
The Tacoma Times, May 31, 1941 (Tacoma - Washington)

In all wars there are prisoners, and that of Cuba would not be less, but in that war there were some special ones, following the US newspapers, we can know of their experiences, in October 1898, it arrived in St. Joseph - Michigan, to the house of Captain Lloyd Clark, a cat, the cat was sent by his brother Charles E., captain of the battleship Oregon, the cat was one of the two rescued from the Spanish cruiser-battleship Christopher Columbus, he carried a note with a ribbon in the colors of the flag, the card said, "To a good American: Treat me kindly, and give me food, as I am a prisoner of war of the Christobal Colon, being forwarded by the crew of the Oregon to the brother of the gallant commander, Charles E. Clark, whose brave efforts forced the Christobal Colon to surrender July 3, 1898.". The cat did not have a long life in its new lands, but yes, it did not go unnoticed, it participated in an exhibition in Indianapolis, and in the 1st Chicago cat exhibition, residing at 4011, Drexel Boulevard, home of Mrs. Leland Norton, and obtaining a special medal in the contest, on his return home to Benton Harbor (St Joseph - Michigan) died, without knowing the cause, it was December 17, 1898.
Walker Lake Bulletin, February 01, 1899 - Hawthrone - Nevada

The other went to Iowa battleship by order of Captain Bob Evans, in June 1899 the ship was in dry dock in the Seattle area (Washington) in Port Orchard, it could be seen accompanying the battleship's mascot, a goat, Well we will say that she was a cat, and had offspring, that year in the same boat, one of her children was the cat Rey Alfonso, who stayed in Alameda (San Francisco - California), during a visit of the battleship, delivered to the municipal engineer I N Chapman, it died in November 1911, at the hands of two French bulldogs. In that June in Seattle, you could also visit U. S. Revenue Cutter McCulloch, who was in the battle of Cavite (Manila - Philippines, May 01, 1898) and who also, of course, had a feline pet, it was a Spanish cat.
It seems that in those times, it was common that there were animals on the ships of the North American navy, in January 1899, in New York, were the Indiana, Massachusetts and Brooklyn, some columnist defined them as zoos. The Indiana had one pig, one goat, four black cats, one tiger cat, two kittens, and one dog. The pig was collected by sailors in Guantanamo (Cuba), they said that the Oregon had another and collected from Cristobal Colon. The Massachusetts, had a hen, a rooster, a goat, a mastiff dog. The Brooklyn had its own zoo, a goat, a deer, a Spanish cat, a Yankee cat and his family, and a dog. The Spanish cat was picked up from the María Mercedes cruise ship in Santiago de Cuba, they named it Cervera, and had with a necklace with a “Cuba Libre” plaque, although other sources say it came from Vizcaya.
The flagship of the Spanish fleet was the armored cruiser Infanta María Teresa, although the ship suffered serious damage in the battle, the North Americans tried to recover it and take it to their country, on the ship, apparently a cat had remained, which was of Admiral Cervera, was recovered by Lieutenant Hobson, towed by the Vulcan, from Cuba to Charleston, on the way to pass near the Bahamas, they suffered a hurricane storm, and the captain of the ship, ordered to abandon the María Teresa, and cut The moorings, but the cat decided to continue on the boat. Days later the remains of the cruise ship were seen, upon learning this information, Hobson sent for the ship, but it could no longer be recovered, and Lieutenant Simms was also sent to search for the cat, and he found it on an island in the Bahamas. , the natives had saved it and the chief had given it to his son, Simms had to pay the chief 15 dollars to get it back, what was the island called? Yes, cat island. The trip back to the USA, was made in the Vulcan, and as soon as they left the port, the sky filled with clouds and the barometer was low, then the captain said it was the cat that was a demon, a witch and he wanted to throw it away. overboard, but Hobson intervened, to save him, and saying that “It should be you. This cat has given usa ll an extraordinary example of fidelity. She clung to her ship when everybody else deserted it. Alone she stood guard for two weeks while the sea swept over her hulk. She helped me raise the Teresa and would have got her all the way to Charleston if you hadn’t lost your nerve and set the cruiser adrift. Even adrift, all through the hurricane, that cat knew exactly wher to go. Do you know the name of the coral key to which that brave little captain laid her course? Look at your chart. It’s Cat Island!” ", it was a female cat and would receive the name of Maria Teresa.
No only, there were prisoners catlikes at sea, but also on land, after the capture of the San Juan hill, a cat appeared, which must have belonged to one of the Spanish families in the area, and which was collected by Major Alfred C Markley, and they called him Supuello, after the Rudyard Kipling poem that was sung by the troops, and he returned with him to his home, Fort Douglas - Salt Lake City (Utah).
Rear Admiral Richmond Pearson Hobson (Greensboro – Alabama March 7, 1870 – New York March 16, 1937)
Naval History and Heritage Command – United States
1898. Armored Cruiser María Teresa.

The North American newspapers,in the 19th century, when they made articles on the different breeds of cats,in the case of the Spanish cat, they considered it as a hybrid, dating from the Arab invasions, they were black, white, black and white, fulvous, it was a highly appreciated breed, but not as a pet or companion animal, but as a business, for its fur, in 1895, the establishment of a huge cat breeding farm in Cincinnati (Ohio) was announced. 8 acres (32,374.9 m2) would be used for buildings and facilities, and cats would be raised until their fur is old enough to have a different market value. The original stocks would be imported from Spain. At the end of the second decade and the beginning of the third decade of the 20th century, it was listed in markets such as Saint Louis or New York (04/09/1919 - $ 1.95, the wild cat from $ 1 to $ 13.50, from marten $ 127), and those skins were for coats.

New York Herald, January 22, 1922 

New York Evening, January 02, 1926

The Glens Falls Times, August 06, 1935  - Glens Falls - New York

But the thing did not stop there, in New York newspapers, since the 1950s, in crosswords, the term "Spanish cat" would appear as a definition, sometimes in crosswords around the world, other animal farms, other gems of October.
The Evening Star, from Washington DC, in 1930, said that in the countries of the Gulf of Mexico, it was said that the Spanish were famous for hiding things and there was a saying, that a reserved person is like a Spanish cat, since the Spanish cats buried the trinkets …… 
We could also say that many of those who said it, they could have some Spanish blood.

Bibliography: Library of Congress, New York Libraries




2 comentarios:

  1. Tan ariscos que se ven los gatos y mira esos así de fieles de tu historia!!! Me ha gustado mucho conocer de ellos y entristecido saber que también fueron criados para pieles.... Siempre aprendo mucho con tus entradas, gracias José!

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